Diario de viaje 4° Emisión - Se acerca el final, o mejor no

33 de Agosto, 2033

NOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO!!!... Grite al ver que se me caía el paquete de panchitas justo al llegar a la cima. Me quise matar porque las había guardado para festejar la llegada, pero bueno... tuve que conformarme con los caramelos media hora que me había dado mi vieja.

Segui adelante, todavía con el dolor de la perdida de mis hermosas panchitas, que será de ellas? Habran tenido familia? O habrán sido el alimento de una manada de mamuts congelados que hace miles de años no comen nada porque como estan congelados no pueden moverse? O peor! Que tal si cayeron en una taza gigante de leche con chocolate caliente y fueron comidas por Goicoche de las nieves??? NOOOOOOO, PANCHITAAAAAAS... Me tomó mas de tres días dejar de lamentarme como un, un, un, no se, no se me ocurre el nombre de un animal que llore mucho, algo así como una hiena, pero que en vez de reir, llore.

Seguí caminando y a lo lejos, pude algo que parecían cabezas moviéndose desde abajo, pero al acercarme lentamente y ver que seguían siendo pequeñas me die cuenta de que no, no eran mas que bolitas de plastilina que alguien (quien sabe como) había dejado ahí... tal vez algún pibe superdotado las revoleo para joder...

Me di cuenta que eran de plastilina porque cuando, luego de intentar comer una, pise otra de ellas que me enchastro mis nuevas converse all star blancas... Se que no son el mejor calzado para alpinismo, pero bueno es lo que tenia loco, les clave unas chinches en la base y se la re bancaron, en serio, creo que voy a patentar la idea, seguro alguno de ustedes me van a robar la idea, todo el tiempo tengo buitres alrededor que se llenan de plata con mis gloriosas ideas...

Una vez establecido en la cima arme la carpa (si, traía carpa, que creen que soy, un idiota) y me tire a descansar, la vista del cielo era espectacular, empecé a descubrir que la fauna de aves era muy rara, bastante inusual de hecho, desde lombrices hasta almanaques voladores, todos en fila y cantando we are de champions.

Esta imagen me estremeció y, mas aun al ver un grupo de teros que hacían una coreografía al escuchar el canto de los almanaques, esto me movilizo a seguir caminando e investigando, me levante a las 2:43 am y dirigi mis pasos hacia una zona oscura que despertaba curiosidad...

Fin de la transmisión